En medio de las tensas relaciones entre los componentes del grupo debido al consumo de las drogas, Aerosmith publicaría el último gran disco de su primera etapa, el cual pese a no contener la contundencia, el desparpajo y la brillantez de sus primeras obras, seguía atesorando una gran calidad. Grabado en un viejo convento de Nueva York que fue acondicionado para dichas sesiones de grabación entre los meses de Junio y Octubre de 1977. Fue producido por Jack Douglas, quien ya había estado al frente de los controles en los anteriores álbumes. En este quinto álbum sobresalen la juguetona rock and roll que da título al álbum, la boogie rock “Critical Mass”, la poderosa “Get It Up”, la pesada hard rock “Kings and Queens” o la boogie blues “Milk Cow Blues”. Pese a que no llegaría al éxito comercial del anterior “Rocks”, este “Draw The Line” lograría un meritorio onceavo puesto en el Billboard y varios discos de platino por sus ventas en el mercado norteamericano.
