jueves, 6 de junio de 2024

Van Der Graaf Generator-World Record (1976)

Van Der Graaf Generator son sin duda la banda mas extraña de todas las grandes bandas del rock progresivo de la historia, su estilo no tiene referencias ni precedentes a lo establecido y de hecho nunca fueron considerados la tradicional banda de rock.
Ellos no fueron ni de lejos semejante a ninguna de las de su misma época, como por ejemplo la ausencia de dos de los instrumentos habituales como el bajo y la guitarra, y consistiendo básicamente en un baterista técnico y muy jazzistico, en varios teclistas y un saxofonista.
Su música estaba tejida de una mezcla de sonidos espesos y densos, con insólitas capas oscuras de melodías trazadas una tras otra con un sin fin de cánones, con momentos de sosiego que se fusionaban con una agitada distorsión de música esquizofrénica y acida.
La faceta barroca con unos textos excelentes de su líder Peter Hammill hablan de lo místico hasta lo cotidiano, pasando por la religión o la astrología, mostrando igualmente una vertiente gótica y atmosférica, con recreaciones de su propia versión del Apocalipsis, con referencias cruzadas al ocultismo o a la ciencia atómica nuclear.
En sus primeros años lograron crear formidables discos como "The Least We Can Do Is Wave To Each Other" (1970), "H to He, Who Am the Only One" (1970) o "Pawn Hearts" (1971), considerados todas ellas obras maestras del rock progresivo y del rock en general.
En una segunda etapa la banda grabaría obras igualmente formidables como este “World Record”, un trabajo en donde ampliaron sus horizontes instrumentales, otorgando un mayor protagonismo a la guitarra eléctrica.
Esta experimentación tuvo como resultado un sonido aún mas lúgubre, denso y emocionante, a la par que melódico como podemos comprobar en cortes como la intensa “When She Comes” o en la irónica “Mask” que culminan con la épica y monstruosa suite “Meurglys III (The Songwriters Guild)”, un extenso tema, totalmente progresivo y serpenteante, en donde incluso hay acercamientos a ritmos reggae y con la gótica y ciertamente optimista “Wondering”, con la cual se cierra este fantástico álbum.