Pese a ser acusados en algunas ocasiones como un mera copia de los australianos AC/DC, Krokus supieron labrarse una carrera fructífera repleta de grandes momentos que han pasado a los anales del heavy metal mundial con sobresalientes trabajos como "Metal Rendez-Vous", "Hardware", "Headhunter" o "One Vice At A Time". Si bien es cierto que sus raíces parten del enérgico y visceral hard rock de las huestes lideradas por los hermanos Young, también es cierto que ellos lo adornaron con el sonido metálico de sus guitarras y unos intrincados arreglos, convirtiendo su estilo en un heavy rock demoledor y adictivo. En 1980 esta banda suiza se consagraban definitivamente publicando su cuarto registro, este "Metal Rendez-Vous", en el cual la formación compuesta por el vocalista Marc Storace, los guitarristas Fernando von Arb y Tommy Kiefer, el bajista Chris von Rohr, el teclista Jürg Naegeli y el baterista Freddy Steady, reflejaban su plena madurez estilística con una serie de incendiarios cortes como "Heatstrokes", "Come On", "Lady Double Dealer", "Bedside Radio", o la frenética "Back Seat Rock´n´roll", las cuales contrastan con la sugestiva balada "Streamer" o la compleja "Fire". El álbum se convertiría en uno de sus mayores logros creativos y comerciales, logrando cuatro discos de platino y unas enormes ventas a nivel europeo.