El noveno álbum de Deep Purple titulado “Stormbringer”, fue publicado el mismo año que el anterior “Burn”, y fue el segundo con la nueva formación en donde aparecían el vocalista David Coverdale y el bajista Glenn Hughes que habían sustituido a Ian Gillan y Roger Glover después del álbum “Who Do We Think We Are” de 1973.
Pero además con estos cambios mencionados, también había comenzado un cambio en el estilo del poderoso hard rock de los clásicos Deep Purple, hacia derroteros enfocados a los sonidos funk y soul que ya se intuían de manera sutil en el anterior “Burn”.
En “Stormbringer” esos sonidos ya prácticamente inundan el estilo del grupo como queda demostrado en temas como la funk psicodélica “Love Don´t Mean A Thing” y la soul “You Can´t Do It Right”, que manifestaban las influencias de Coverdale y Hughes a la hora de componer en detrimento del liderazgo compositivo de Ritchie Blackmore. Otra muestra de ese cambio esta en la atmosférica y planeadora “Holy Man” y la soul rock “Hold On”. Sin embargo el sonido clásico no desaparece totalmente y esta presente en la dinámica “High Ball Shooter”, en la poderosa “Strombringer” y en la magnifica rock “Lady Double Dealer”, mientras la portentosa “The Gypsy” es una antesala de lo que muy pronto Blackmore haría con sus Rainbow.
El álbum acaba con una de las grandes baladas de toda la historia de la banda como es “Soldier of Fortune”, un prodigioso tema en donde sobresalen la voz de Coverdale, la guitarra de Blackmore y las enormes capas de teclados de Jon Lord.
“Stormbringer” tuvo un feroz recibimiento por parte de los fans de la banda, que con el tiempo fue recuperando el lugar que se merece como uno de los grandes momentos del hard rock de los setenta.
Meses después Blackmore abandonaba Deep Purple para fundar su propia banda “Ritchie Blackmore´s Rainbow” y el resto seguiría adelante con el nuevo guitarrista Tommy Bolin con el que publicarían el meritorio “Come Taste The Band”.