En 1978 Journey daban un salto cualitativo musicalmente, orientando su estilo de rock y jazz progresivo, hacia los terrenos mas comerciales y accesibles.
La primera decisión fue ampliar la banda con el excelente vocalista Steve Perry, el cual se unió al guitarrista Neal Schon, al teclista y voces Gregg Rolie, al bajista Ross Valory y al baterista Aynsley Dunbar.
El primer álbum bajo esta nueva formación fue "Infinity", en donde el cambio musical es dramáticamente opuesto a todo lo que habían hecho hasta esos momentos.
Un álbum que esta compuesto por una fusión pegadiza de canciones orientadas al rock en donde brillan los ganchos vocales, las complejas composiciones y un gran trabajo instrumental de guitarras y teclados, un sonido no muy alejado de lo que Foreigner, Toto, Styx o Boston hacían en esos mismos años.
En este trabajo la instrumentación de Schon es sencillamente magistral, con toques guitarrísticos suaves al mismo tiempo que enérgicos y dinámicos, mientras que la voz de Perry es contagiosa y conmovedora.
Clásicos inmediatos de la música rock como las irresistibles "Lights", "Anytime", “Wheel In The Sky", "Feeling That Way" o "Opened The Door", auparon el álbum hasta los primeros puestos de las listas norteamericanas, con mas de tres millones de copias vendidas, una cifra que superaba con creces las ventas de todos sus álbumes anteriores juntos.