La carrera de Robin Trower ha estado marcada por sus inicios grandilocuentes junto a los míticos Procol Harum en los años sesenta. Ya en la década de los setenta comenzaría una meteórica carrera en solitario publicando una serie de álbumes de gran clase y enorme éxito que lo aclamaron como el Jimi Hendrix blanco debido a su enorme talento con la seis cuerdas. Álbumes como "Twice Removed From Yesterday” (1973), "Bridge Of Sighs" (1974), "For Earth Below" (1975) o "Long Misty Days" (1976), le colocan en la cúspide de los grandes guitarristas rock de la década de los setenta. Sin embargo a partir de la década siguiente, sus trabajos tuvieron menos intensidad y pasaron mucho más desapercibidos, pese a su incuestionable calidad. No seria hasta mediados de los noventa, cuando volvería a la senda del éxito y el merecido reconocimiento con una serie de discos enfocados en el blues con guiños al hard rock de sus inicios. Uno de esos álbumes fue el publicado en el año 1997, "Someday Blues", en el cual seguía en ese ascenso creativo y comercial componiendo un trabajo repleto de brillantes cortes enfocados al blues como "Next In Line", "Someday Blues", "Crossroads", "I Want You To Love Me´" o "Shining Through".