Otra de esas magnificas bandas de corto recorrido fueron los afro-británicos Demon Fuzz, compuesta por descendientes sudafricanos que habían emigrado a Inglaterra después de la Segunda Guerra Mundial aprovechando la escasa mano de obra en las industrias británicas provocado por la perdida de miles de hombres en esa trágica contienda.
Esta singular banda estaba encuadrada dentro de un variopinto estilo que fusionaba los ritmos latinos emparentados con Santana, el afro rock de Osibisa y elementos del jazz y el funk fusionados con el jazz progresivo.
Su formación estaba compuesta por ocho componentes, cinco de ellos conformaban la habitual sección de rock, batería, bajo, órgano Hammond, guitarra y voz, y el resto eran músicos de vientos y percusión.
Después de rodarse durante algunos años por diferentes clubs de Londres, consiguen un contrato con el sello Dawn con quienes publican su único álbum “Afreaka!”, un magnifico trabajo en donde el ritmo y la enérgica música atrapan al oyente desde la inicial y trepidante “Past Present And Future”, un tema instrumental de nueve minutos espléndidos de brass rock, la vena jazz rock esta en “Disillusioned Man”, en donde se acercan a los tratamientos musicales de bandas como Chicago o Blood Sweat and Tears. En la exótica “Another Country”, la banda muestra su lado ecléctico con un tema sórdido y elegante. Para la segunda cara se reservan sus momentos mas progresivos con la inquietante “Hymn To Mother” y la psicodélica y dinámica “Mercy (Variation No.1)”. Después de la publicación de este disco, el grupo se embarco en una extensa gira por el Reino Unido junto a otras bandas del mismo sello discográfico como Camus o Heron, además de alguna aparición estelar en la BBC británica.
La grabación de un posterior maxi-single seria la ultima aportación oficial de esta banda, desintegrándose algún tiempo mas tarde por la falta del éxito pese a la enorme calidad que atesoraban. Su único álbum, con el añadido de algunos temas que nunca fueron publicados, ha sido reeditado continuamente estos últimos años tanto en el mercados británico como el norteamericano y japonés, obteniendo un cierto entusiasmo entre los seguidores a los sonidos oscuros del progresivo de la década de los setenta.