En 1974 The Rolling Stones lanzaban su duodécimo álbum “It´s Only Rock´n´Roll”, el cual supuso la despedida de su guitarrista Mick Taylor. Este hecho llevaría a que Mick Jagger y Keith Richards buscaran un sustituto ideal para afrontar el futuro de la banda.
Durante algún tiempo se rumorearon los nombres de Rory Gallagher, Jeff Beck o Peter Frampton quienes declinaron la oferta, otros como Harvey Mandel o Wayne Perkins también estuvieron entre los nominados, recayendo el puesto finalmente en Ron Wood.
Ron Wood por entonces aún pertenecía a la banda The Faces y como tal solo podría colaborar como musico invitado en el siguiente álbum de los Rolling, “Black and Blue” publicado a mediados de 1976.
Por lo tanto la formación oficial de la banda en esos momentos estaba compuesta por Mick Jagger, Keith Richards, Charlie Watts y Bill Wyman, mientras que Ron Wood aparecería como músico invitado, donde además también se encontraban Billy Preston, Nicky Hopkins, Ian Stewart y los mencionados Harvey Mandel y Wayne Perkins.
“Black and Blue” fue grabado en diferentes estudios de Múnich, Nueva York y Florida bajo la producción de los propios Jagger y Richards y otros productores entre los que se encontraban Glyn Johns. Este nuevo lanzamiento contiene un repertorio basado en un estilo algo alejado del habitual e inconfundible rock´and´roll de los Rolling Stones, con una colección de temas diversos en donde salen a relucir sonidos como el reggae y el funk, además de una serie de canciones enfocadas a la jam instrumental.
Una faceta instrumental que opacaba de alguna manera las melodías vocales y que le llevaría ser considerado un álbum controvertido y transitorio, siendo recibido con cierto estupor por una parte de sus millones de fans.
Sin embargo terminaría logrando un disco de platino por sus ventas, un meritorio numero uno en las listas norteamericanas y un segundo lugar en las británicas.
La funky “Hot Stuff” abre esta nueva entrega con un ritmo discotequero, mientras el sonido clásico de los Stones esta presente en “Hand Of Fate”, con la siguiente “Cherry Oh Baby” vuelven a adentrarse en otros meandros musicales, esta vez con el reggae, finalizando la primera cara de la placa con la vibrante y espléndida jam “Memory Motel”. La segunda cara comienza de igual manera con la jam “Hey Negrita”, que sin embargo no tiene la intensidad de la anterior. Para acabar este versátil y atractivo disco, aparecen la stoniana “Melody”, la sentida balada “Fool To Cry” y la chulesca rock´n´roll “Crazy Mama” .