Con el séptimo álbum de Porcupine Tree, “In Absentia”, la banda liderada por Steven Wilson, no solo conseguía su mejor obra, si no también el punto culminante a la creatividad del genial compositor, cantante y guitarrista, sin duda uno de los músicos mas geniales de las ultimas dos décadas.
Si durante gran parte de los noventa, la banda se fue labrando una gran reputación entre la comunidad progresiva con álbumes tan enormes como “The Sky Moves Sideways”, “Signify” o “ Stupid Dreams”, en los cuales mantienen esos sonidos progresivos que los caracteriza, pero fusionados con diferentes matices y sonidos mas comerciales, en “In Absentia” consiguen de manera racional, fusionar los elementos psicodélicos y el prog con la potencia del heavy metal como queda demostrado en la inicial “Blackest Eyes”. El resto del álbum se mueve eclécticamente en distintas variaciones estilísticas, con composiciones complejas a la par que otras mas sencillas pero tremendamente adictivas, demostrado en piezas como “Trains”, “Prodigal” o “Strip The Soul”, mientras la vena hard progresiva están muy presentes en cortes como “Gravity Eyelids” o “Weeding Nails”, en ejercicios oscuros y poderosos como “ The Creator Has A Mastertape” o exquisiteces como “Heartattack In A Layby” o “Collapse The Light Into Earth”.
“In Absentia” se ha convertido en una de las obras fundamentales del nuevo siglo, no solo por contener unas memorables composiciones, si no también por la soberbia ejecución instrumental por parte de cada miembro de la banda, además de una producción impecable por parte del propio Steven Wilson.