Una de las joyas del heavy metal y al mismo tiempo infravalorado por las nuevas hordas de seguidores de la doncella de la época con Bruce Dickinson como frontman. Considerado una de las obras capitales de la llamada “NWOBHM” ( New Wave of British Heavy Metal ), en este primer álbum Iron Maiden mostraban todas las cualidades de dicho movimiento, con el ápice añadido de los ecos del punk aderezado con sonidos mas complejos y épicos.
Una banda que aún estaba por reafirmar su alineación mas clásica, exitosa y duradera, conformada por entonces por el bajista Steve Harris, los guitarristas Dave Murray y Dennis Stratton, el batería Clive Burr y el vocalista Paul Di´Anno. Una formación que a partir de tercer álbum tendría significativos cambios como la entrada del mencionado Bruce Dickinson, y un año antes con la del guitarrista Adrian Smith y posteriormente con la del baterista Nicko McBrain, es decir la que seria su formación mas clásica y longeva.
Pero centrándonos en este primer y germinal álbum, estos jóvenes músicos demostraban una gran virtuosidad instrumental y una ideas preconcebidas muy claras, todo ello revelado en la poderosa “Prowler”, la épica instrumental “Transylvania”, la maratoniana progresiva “Phantom Of The Opera”, las viscerales y punks “Running Free" y “Sanctuary” o la gloriosa “Iron Maiden”. A partir de aquí empezaría la leyenda de una banda tan icónica como fundamental en la historia del heavy metal y del rock en general.