miércoles, 22 de septiembre de 2021

Roger Waters-Radio K.A.O.S. (1987)

“Radio K.A.O.S.” es el segundo trabajo del ex líder de los Pink Floyd, Roger Waters, un álbum enrevesado y al mismo tiempo vital y enérgico. La compleja trama que se transmite en este trabajo conceptual trata de un joven discapacitado en silla de ruedas (Billy), que recibe en su cabeza las ondas de radio y que las utiliza para comunicarse con un revolucionario disc-jockey de una emisora local. Dentro de este surrealista contexto, aparece la figura de su hermano, acusado de un crimen que no cometió, además de una serie de temas menos recurrentes como la manipulación del sistema de misiles nucleares o referencias a la Libia de Gadafi.
De alguna manera este Radio K.A.O.S.”, es la secuela de la trilogía iniciada con el álbum de Pink Floyd (en realidad de Roger Waters y su banda) “The Final Cut” y que finalizaría cinco años mas tarde con el mas político y reflexivo “Amused To Death”.
Musicalmente todo el álbum muestra mucha energía y una gran vitalidad, algo por otra parte no muy habitual en las obras oscuras y con cierto pesimismo de Roger Waters, lo que lo convierte en su trabajo de tono mas comercial y con unos sutiles sonidos mas pop que progresivos. La mayoría de la música expuesta aquí no son canciones individuales, si no actos separados dentro de una misma obra. Waters consigue de manera impresionante combinar el dialogo de Billy (reflejado aquí con una voz mecanizada y computarizada) y Jim, el cínico disc-jockey, logrando con ello una fascinante y en muchos momentos una deslumbrante grabación ambiciosa y alucinante.
En cualquier caso son la triada final con “Home”, “Four Minutes” y la melódica “The Tide is Tunning” lo mas destacado de este álbum.
Esta ultima canción fue el colofón al celebre y multitudinario concierto en Berlín ofrecido por Roger Waters en 1990, junto a una constelación de estrellas, para celebrar la caída del muro de Berlín.
En la gira posterior al álbum, Waters incluso utilizaría una gran torre de radio con un Dick-jockey en el escenario, para recrear lo mas fielmente la trama y también (y todo hay que decirlo), contrarrestar la espectacular puesta en escena que por aquellos momentos ofrecía los Pink Floyd de David Gilmour, con su Tour “A Momentary Lapse of Reason”.