jueves, 24 de diciembre de 2020

IQ-The Wake (1985)

IQ siempre permanecieron a la sombra de Marillion e incluso tuvieron la mala suerte de que uno de sus grandes logros, el álbum “The Wake”, fuera publicado casi al mismo tiempo que la grandiosa obra del neo progresivo "Misplaced Chilhood", y ello fuera ápice para ser lastrado como una pesada losa. Considerado uno de los mejores trabajos del estilo, "The Wake", es el segundo álbum de IQ y sigue la línea de su antecesor "Tales From Lush Attic", pero con una infinita mejor producción y con unos arreglos más cuidados y complejos.
En esta ocasión la banda crea un disco conceptual que trata sobre el hombre cruzando el umbral de la muerte, para lo que musicalmente se destila un sonido oscuro, misterioso y funesto.
Siguiendo la estela del sonido de Genesis en la era de Peter Gabriel, “The Wake” es un disco que claramente esta inspirado en su esencia progresiva, los temas desarrollados aquí son producto de una formación de músicos muy talentosos que lejos de imitar, aprovechan sus habilidades tomando como base las cualidades de cada uno de ellos.
Desde la intro “Outer limits”, con esa grandiosidad atmosférica, la melancólica y melodramática “Headlong”, con un final apoteósico o la excepcional “Magic Roundabout”, nos transporta a los surcos de obras magnas como “Nursery Cryme” o “Foxtrot” con esos a veces rudimentarios y a la vez armónicos tratamientos de muchas partes de la guitarra, las texturas de los teclados y los sonidos tenebrosos, los cuales están hechos así para recrear una densidad emocional y lúgubre, todo ello refrendado por la voz teatral y a veces densa de su cantante Nicholls.