Surgidos de las cenizas de los inconmensurables Vanilla Fudge, Cactus fue para muchos la mejor respuesta norteamericana a Led Zeppelin, y aunque ellos tenían muchos argumentos para ello, lo cierto es que el poder y la energía de Tim Bogert, Carmine Appice, Rusty Day y Jim McCarty era un rock menos pulido y mas visceral que las huestes de Page y Plant.
Después de un primer álbum sorprendente en donde sobresalían temas como "Parchman Farm" o "Feel So Good", llegaría su segunda y mejor obra "One Way…Or Another" publicado en 1971. Para este álbum seria el famoso Eddie Kramer quien les guiara en la producción del disco, y su labor se nota en la progresiva "One Way…", otros temas como "Rock´N´Roll Children" es pura dinamita en la guitarra de McCarty, mientras "Long Tall Sally" es un boogie rock contenido con un ritmo melódicamente adictivo.
Pero la banda también muestra su versatilidad y su vena psicodélica con la hipnótica "Feel So Bad", o la zeppeliana "Hometown Bust".
Cactus no tuvo mucha mas continuidad, después de dos aceptables álbumes posteriores, terminarían disolviéndose a finales de 1972, cuando Jeff Beck llamaría a Bogert y Appice para constituir el trío Beck, Bogert & Appice con los que grabarían dos estupendos trabajos pero mas enfocados a los sonidos del blues rock.