viernes, 27 de noviembre de 2020

Gravy Train-Staircase To The Day (1974)

De entre todos los grupos británicos del underground progresivo de principios de los setenta, están Gravy Train, que durante el periodo comprendido entre 1970 y 1974, publicaron cuatro interesantes álbumes en donde su mayor virtud eran sus sonidos progresivos, en los cuales las guitarras estaban en la vanguardia con una excelente fusión de teclados, flauta, bajo y batería. Formados por el guitarrista Norman Barrett en la ciudad de Lancashire al noreste de Inglaterra en 1969, estaba formada además por Barry Davenport como baterista, J.D. Hughes como teclista, flautas y vocales y el bajista Lester Williams. En su primer álbum publicado bajo el sello Vertigo, “Gavy Train” (1970), ya se podían intuir las influencias de bandas como Jethro Tull gracias a su rhythm and blues y el folk rock, bajo una solida música progresiva y con ciertos acercamientos al hard rock.
Después de los álbumes "(A Ballad) A Peaceful Man" (1971) y "Second Birth" (1973), llegaría su obra mas completa "Staircase To The Day" (1974), este ultimo publicado bajo la discográfica Dawn, el sub sello progresivo de Pye Records.
Con una espectacular portada diseñada por Roger Dean, "Staircase To The Day" es un álbum que presenta una estupenda colección de temas que sintetiza la escena del rock progresivo de la época. Desde la inicial "Starlight Starbright" se puede observar que la banda había conseguido un sonido mas cohesionado que en los álbumes anteriores. En parte esto fue debido a la incorporación de un segundo guitarrista (George Lynon), así como la producción por parte de Vic Smith, quien había producido los discos de Black Sabbath "4" y Judas Priest "Rocka Rolla".
Es tal vez por ello que los sonidos de flauta son relegados a un papel secundario, apareciendo sólo en los temas “Staircase To The Day”, con un gran trabajo de Mellotrón y en la acústica “The Last Day”. Otros temas como "Never Wanted", nos recuerdan a los Uriah Heep mas progresivos, mientras "Busted In Schenectady", tiene el encanto de los psicodélicos Pink Floyd con esa interacción de bajo y Mellotrón. Por otro lado la banda muestra su lado mas pastoral con las acústicas "Bring My Life On Back To Me" y "Evening Of My Life", en donde se muestra las dotes de su vocalista Barrett y el órgano de Hughes.
"Staircase To the Day" es un gran disco que después de escucharlo detenidamente, nos hace cuestionar el que uno se pregunte, el por qué no lograron el éxito? como si lo hicieron algunos de sus contemporáneos, con trabajos de su misma envergadura o incluso de menor factura.